Lo primero que hago todas las mañanas cuando me levanto y llego a la cocina a desayunar es encender la tele para escuchar las noticias. Hubo un tiempo, en que no las veía y no las escuchaba. Me desconecté. Y tal y como está el patio valdría más la pena hacer esto, pero es que no puedo dejar de estar informada (o desinformada, que a veces los medios...). Ver las noticias generalmente deprime, de una o dos noticias buenas que dan, otras dos de relleno, el resto malas, malísimas.
Por eso este año nuevo que está empezando, aunque de momento no voy a dejar de ver las noticias, pienso sentir y estar siempre positiva y pienso practicar el positivismo. Pensamiento positivo. Igual que el año pasado y el anterior y el otro...
Lo tengo comprobado. Cuando tienes un mal día en que todo te va mal, esa energía que llevas encima, por supuesto negativa, lo único que hace es atraer a ti más cosas y situaciones negativas que acaban provocando más cosas negativas; por el contrario, si tienes un día redondo, positivo y alegre, te sorprendes de las cosas buenas que te pasan. Esto no es Ley de Murphy, es Ley de Atracción.
Esta mañana me he levantado con la noticia de la muerte del exitoso diseñador de moda nupcial Manuel Mota, Director Creativo de Pronovias. Supuestamente ha sido un suicidio, han descartado el homicidio por que el modisto ha dejado escritas tres cartas: una para su familia, una para su novio y otra para los Mossos (policía). Los rumores apuntan a que últimamente no estaba pasando una buena racha laboral.
¿Qué le está pasando a la gente? No soy capaz de entenderlo. Millones de personas en el paro y la gente que tiene trabajo se suicida. Entiendo, que para hacer una cosa así, se tiene que estar muy mal de la cabeza. La maldita cabeza que es capaz de llevarnos a estos extremos. Y sé que no es el único caso, ya comenté hace unos días en un post que un vecino de mi comunidad también se había suicidado y también tenía trabajo...
Siempre lo digo, una crisis es igual a oportunidad.
Es oportunidad para tener ideas brillantes y poder salir adelante. Es oportunidad para hacer otras cosas a las que hacías habitualmente. Es cambio. Movimiento. Momentos de cambiar de hábitos y de abrir la mente y los ojos para poder ver más allá.
Siempre, siempre, siempre al final del túnel hay una luz. Si no, que me lo pregunten a mi misma, después del año 2012 que pasé estoy empezando a ver el brillo de esa luz. O a la misma Azucena Paredes, esta chiquita que desahuciarion con tres niños y su abuela a su cargo.
Ahora la ha apadrinado una familia Noruega y gracias a la solidaridad de un montón de gente tiene un techo donde vivir y pueden comer ella y sus hijos. Y además mientras la hermana de otra chica a la que también iban a desahuciar veía la noticia del desahucio de Azucena en la tele, se puso en contacto con el medio y consiguió el teléfono de la misma Azucena y ahora esta chica también ha sido apadrinada por otra familia Noruega...
Con esto quiero decir, que por muy mal que nos vayan las cosas, por muy negra que pinte, la esperanza es lo último que debe perderse. Hay que tener y sentir la fe en que vamos a salir de esta (de cualquier situación en la que te encuentres) y siempre con una sonrisa intentando estar contento, no me atrevo a decir feliz porque estas situaciones no son para estar feliz, pero si contento y afrontar el día a día con optimismo, estando convencido de que ese va a ser el mejor día de tu vida y así cada día. Y así será. Doy fe.
Levantarnos pensando en que ese va a ser el mejor día de tu vida y dar las gracias por ello.
Yo tenía una compañera de trabajo, que era... uf, como la hecho de menos. Claudia, de Tenerife. Tengo unas ganas enormes de verla un día. Un día me dijo una frase que se me marcó a fuego.
El caso es que yo no estaba todo lo bien que quería estar en una empresa, justamente con los jefes que me encontré ayer. (Jolín todo vuelve, esto es un círculo cerrado). Yo tenía unas pretensiones que ellos no podían darme. Y no pasa nada. Tu sigues tu camino, yo sigo el mío y tan amigos y hasta nos da alegría de recontrarnos de nuevo. Yo me quería marchar de allí y encontrar un trabajo que me pagaran lo que yo creía que me merecía, con un horario que yo quería. No pude negociar sueldo, pero pude negociar horario y entonces me puse a hacer un cursos de redes informáticas.
Un día en el descanso del cursillo, una compañera se me acercó y me dijo:
- ¿A ti que te pasa que siempre llegas como una moto de nerviosa, temblando?
Y le empecé a explicar lo que me pasaba, que tenía un trabajo que no me convencía, que yo me merecía más dinero y quería estabilidad, bla, bla, todo el rollo.
Y entonces me dijo después de preguntarme a qué me dedicaba y que hacía:
- Pues nosotros estamos buscando una Secretaria de Dirección, ¿puedes venir a hacer una entrevista mañana?
No me lo podía creer, acababa de negociar más tiempo y en menos de una semana ya tenía una entrevista con un señor alemán difícil de contentar. Muy exigente, muy alemán.
Me preguntaron que tal mi inglés y le empecé a contestar en inglés, que claro con los nervios metí un poco la pata, pero resulta que les gustó porque "cogí el toro por los cuernos", a los quince días ya estaba trabajando en la nueva empresa, gracias a Laura.
Y resulta que congenié muy bien con este importantísimo señor de negocios alemán, del cual aprendí muchísimo. Hasta que llegué yo, las secretarias le habían durado quince días o menos; yo estuve tres años y medio y me fui a montarme mi propia empresa, no me dejaba irme. Le comuniqué que me iba el 7 de enero y que en quince días me iba. No me dejó y estuve hasta el 2 de marzo, día de mi cumple.
A lo que iba, con toda esta historia de Laura, Claudia me dijo: "fíate de las bondades de los desconocidos" y la tengo grabadita en mi piel, a fuego. Porque, aunque hay gente mala, hay mucha más gente buena. Más de la que nos imaginamos; solo hay que abrir mucho los ojos y expandir mucho las orejas. Y con esa creencia, es con la que me quedo, con la positiva. Porque si pienso que sólo hay gente mala, sólo voy a encontrar gente mala.
Y con tanto paro, tanta depresión y tanta energía negativa, hoy os voy a dejar con este flashmob impresionante, realizado en cualquier oficina del paro española.
Porque la música genera buen rollo, buenas vibraciones, energía positiva y une a las personas. Si no fijaos qué caras tiene la gente al principio y al final. Es magia. Por eso canto, si no, creo que estaría más loca que una cabra, con el estilo de vida que llevamos, siempre lo digo. Cada uno debería buscarse sus recursos para no acabar mal, con lo bonito que es vivir y disfrutar de esta vida, ¡qué sólo tenemos una! Y es un puro milagro. Os deseo lo mejor a todos, de verdad.
Y a los que lo estéis pasando mal os mando un abrazo enorme para daros fuerzas y enegía positiva a tope.
Y gracias querido sobrino Pau (gran) por colgar este precioso vídeo en tu facebook. Es mágico. ¡Para ti un achuchón de los de oso!
2 comentarios:
La verdad es que es un post precioso, emotivo, con el video se me ha soltado alguna lagrimita lo confieso. Gracias!!!. bss Acaramelada
Gracias a ti acaramelada por seguirme. Se que tengo lo del premio pendiente pero es que ando escasa de tiempo y buscar 10 blogs es una árdua tarea, te prometo ponerme un día de estos con lo del premio, que te agradezco enormemente.
besitos y feliz año nuevo guapa, que todavía no te lo había dicho,
MJ
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